Hace un año escribí en mi sitio por primera vez sobre mi padre y su influencia en un aspecto específico de mi vida.
Ha pasado un año más desde que Carlos Eduardo Campos Monge dejó este mundo y a pesar de su ausencia física, su legado continúa vigente.
Después de su partida fue difícil retomar todos esos proyectos personales y profesionales que significan tanto para alguien como yo pero que en esos momentos de dolor y de confusión no significan nada. Con el paso del tiempo uno se da cuenta que la vida continúa y que mejor manera de hacerlo que de la manera que él hubiera querido.
No deja de ser extraña esa mezcla de sentimientos: ese «parece que fue ayer» con el hecho de saber que ya han pasado algunos años y hay que adaptarse a la idea de no volverlo a ver como antes.
Ahora, lejos del dolor y el resentimiento de la pérdida, la comunicación entre él y yo continúa a través de ese lenguaje tan particular que nos unió y lo seguirá haciendo hasta el reencuentro. Ese último aspecto se los quedo debiendo porque no tengo la menor idea de que es lo que pasa cuando dejamos este mundo.
La fotografía es parte de ese lazo indestructible con el cual mi familia cuenta para mantener vivo el recuerdo, para seguir viviendo la vida cuantas veces haga falta.
Gracias por todo.
Hace unos años pase por lo mismo CHEPE, realmente cada mensaje, cada exposición que hagas, cada paso que des, es más cada respiro que das ahi esta EL, estas vivo y el recuerdo a veces duele y otras veces la nostalgia se asoma, cada día que pasa es un recuerdo más o a veces es un recuerdo menos, pero realmente solo nosotros sabemos cuanto les extrañamos al pasar el tiempo, al pasar cada acontecimiento que nos gustaría que ellos estuviesen disfrutándolo con nosotros, amigo VIVES Y EL CADA DIA CONTIGO!!!
jose
soy argentino, de Buenos Aires, y tengo un gran recuerdo de tu padre. Fuimos compañeros de estudio en Turin 1971.Jugabamos al futbol dos contra dos. El con Crisci, otro tico, y yo con un amigo argentino. Ambos me parecieron grandisimas personas y pense que si todos son como ellos en costa Rica , entonces Costa Rica es un gran pais.Me mando una postal con una imagen de Puerto Limon y me invito a ir. Lametablemente nunca pude ir.Yo soy del 42 tambien y me gustaria que mis hijos me recordaran como vos recordas a tu padre. Saludos de este argentino y felicitaciones por tu trabajo profesional. Hasta siempre.
Adolfo Carlos Auñon
Buenas tardes don Adolfo,
Todo un honor y un placer entrar en contacto por este medio y sobre todo saber estas otras facetas de mi padre cuando yo ni siquiera había nacido. Recién cumplí 37 años el pasado viernes y ayer compartí con mi familia la celebración, a pesar de que mi padre ya no está físicamente todos lo seguimos sintiendo muy cerca. Sobre todo con mi sobrino de casi 5 años que nació un par de meses antes de que mi padre se fuera de este mundo, los ciclos de la vida supongo.
Buenos Aires es una ciudad que mi futura esposa (nos casamos el próximo sábado) y yo hemos querido conocer, espero que algún día se nos haga realidad y podamos conocernos en persona. Si decide venir por Costa Rica sepa que cuenta con alguien que le guiará en todo lo que pueda para conocer lo mejor de esta tierra.
Un abrazo a la distancia y no dudo que sus hijos, más allá de como lo recuerden cuando usted no esté, sabrán disfrutar y valorar su compañía y el día a día, el ahora.
Gracias.
Saludos,
J.
Vine a su sito por curiosidad al ver su nombre relacionado con fotos del nuevo Estadio. Y llegué hasta este post.
Me encanta la manera en que ves a la fotografía como un lazo, como un vínculo espiritual, diría yo, con tu padre, para manener el recuerdo y para seguir viviendo. Sin duda esa actitud frente a las vicisitudes de la videa ha de ser parte del legado de tu padre a quien por lo que escribes se puede ver que admiras tanto. Gracias por compartir desde lo más profundo de su corazón cosas que tienen que ver con la vida.
Así, la fotografía da sentido a la vida plena de sentido!!!